La mejor oportunidad para ver esta lluvia será antes del amanecer, después de que se ponga la luna, de lo contrario, es posible que tengas alguna interferencia con la luz de nuestro satélite.
Si bien este año se calcula un promedio de 18 meteoros por hora, en otros años excepcionales, esta lluvia se intensifica y puede producir hasta 100 meteoros por hora (se conoce como un burst o “estallido”), pero resulta difícil saber exactamente cuándo ocurrirá.
El punto desde el cual los meteoros parecen originarse, denominado radiante, es en la constelación de Lyra (de ahí su nombre), al noreste de Vega, una de las estrellas más brillantes en el cielo de esta época.
¿De dónde viene?
Las líridas provienen de las partículas del cometa “Thatcher”, un cometa de largo periódo que orbita alrededor del sol una vez cada 415 años. Sin embargo, los escombros o restos que quedan en la estela del cometa aparecen cada año, y es lo que vemos en el cielo.
Las lluvias de estrellas se producen cuando la Tierra pasa por el camino de un cometa, chocando con diminutas partículas que deja su paso. Es por esto que ocurren aproximadamente a la misma hora todos los años y parecen originarse en puntos específicos del cielo. A medida que estas partículas entran a la atmósfera, se queman y producen esas brillantes luces en el cielo conocidas popularmente como estrellas fugaces.
¿Cómo verlas?
Recuerda que no es necesario un telescopio para ver las Líridas, la clave es intentar buscar un lugar tranquilo, lejos de las luces de la ciudad y esperar unos 30 minutos para que tus ojos se adapten a la oscuridad.
En estos momentos en los que hay que quedarnos en casa, ver el cielo es una maravillosa forma de pasar el tiempo. Así que ¡ojos al cielo!
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